Carta a Torremanzanas

Ahora que la vida por fin me lleva a pensar en lo que quiero de la vida, ahora que tomo decisiones tal como debería tomarlas y no tal como me gustaría tomarlas, ahora que trabajo en lo que me toca porque no se contrata a una desconocida en algo en lo que no se tiene experiencia por mucho que le gustase, ahora que me doy cuenta de que para conseguir lo que uno relamente quiere hay que esforzarse y proponerselo en serio, hay que estirar la cuerda de la pasión, la voluntad y sacrificio, ahora que escucho a la gente doce años (o más) mayor que yo las mismas crisis que rondan mi existencia.
Ahora voy y leo las palabras [que me llegaron más adentro de lo que suponía] de Fernando, al que me arriesgaría a llamar amigo. Leo y respiro tranquila pensando en los seres que sueñan con la utopía que no sabemos si alcanzaremos. Leo y me azota la amargura de querer ir a verte a esa casa que puedo ver. Y tus sueños, Fer, me hacen soñar que voy a pintarte un cuadro muy grande [aunque no sepa pintar] para que lo cuelgues en alguna pared de tu caserío. Y sueño que te acuerdas de mí y me invitas a esa casa tuya y allí conozco a gente y a sus historias y sueño que lo que sueño existe, sueño que lo que sueño me atrevo a realizar. Y al final caigo en la cuenta de que todo es posible, de que esa casa debe existir y está en tu mano que exista para animarnos a todos a soñar y cumplirlo. Aunque luego la realidad de nuestros sueños nos defraude... aunque eso dé mucho miedo.

Etiquetas:

2 Responses to “Carta a Torremanzanas”

  1. # Blogger folabe

    Re, sé que en realidad nuestra conexión desde hace tiempo se cimbrea entre los sueños y la poesía, la vida contemplativa y la generosidad para con los que nos rodean, lo diletante y el mojar con pan en los huevos fritos con patatas y chistorra, las risas compartidas y los viajes interiores, las miserias que nos creamos y los cohetes que lanzamos después de superarlas, la incertidumbre y la certeza, el vino y la cerveza, el ron y el "stolisnaya", la tranquilidad ante lo que ha de venir y la curiosidad por saber qué es, las películas en El Barrio y las que nos dejan tirados en el sofá, la celebración de los amigos y ¿tenemos enemigos?
    Por eso, compatriota de emociones, cómplice de miradas, colega de baños, confidente de barras, croqueta de la misma moqueta, espero gustoso ese cuadro. También, y me aprovecho de este momento, una manta de las de tu madre para aguantar el fresco de la tarde en el porche de Torremanzanas.  

  2. # Blogger Nando Rico

    ¡Esa currante ahí!. Algún día de estos a lo mejor me dan curro a mí, pero no sé si ahora que tengo el proyecto de fin de master por delante es eso lo que me conviene. Creo que no, pero trabajar siempre es necesario, y ayuda a sentar un poco la cabeza, como me dice mi madre siempre que bajo a Onil a hacerles la visita.

    Esta noche podríamos juntarnoa a cenar y a echarnos unas risas, ¿no?. Un saludete.  

Publicar un comentario

Buscador